El pasado 4 de Abril, Barcelona, ha vivido un encuentro además de único, inusual: La celebración de los 12 años de Paz de Angola. Un país que vivió más de 30 años de guerra, entre la colonial y la civil (27) y que ahora intenta reconstruirse a todos los niveles y sectores, habiendo logrado ya muchas cosas positivas.

En el encuentro, organizado por el Centre Euro África, hemos podido participar mi compañero de INUSUAL Jaen Un Do y yo mismo. Fue realmente una celebración emotiva y especial, aquí tienes algunas fotos del evento.

Barcelona como el centro de la Paz y por la Paz durante un día en que dos continentes, dos países lejanos y culturas aparentemente diferentes han podido manifestar su satisfacción por la paz.

Centré mi ponencia en los logros durante los doce años de Paz. Entre ellos la ida a su primer mundial de fútbol en Alemania, la conquista del primer Miss Universo, por Leila Lopes y naturalmente la repercusión mediática que tiene la música Angoleña, la Kizomba, en Barcelona, en el mundo, y claro está en Corea del Sur.

Jaen Un Do habló de las relaciones culturales, sociales y sobretodo económicas que ya existen entre Angola y Corea del Sur.

También participó el Cónsul Angoleño de Barcelona, que explicó que Angola en este momento es un país de oportunidades y que gracias  a la paz su desarrollo económico es visible y potencial. De hecho, se pasó de emitir cinco visados semanales a más de veinte para empresarios catalanes.

El impacto de la cultura angoleña en el mundo es una demostración de la creatividad y talento que existe en el país. Pero es obvio que un país no puede vivir sólo de música e innovar en el negocio es necesario. Muchas empresas catalanas, españolas intentan la suerte en Angola y vuelven sin conseguir sus objetivos. A mi me parece que este fracaso se debe al choque de dos trenes convencionales, uno, hijo de la organización clásica portuguesa, que está cómodo, parado en la vía, aunque de una forma básica y poco ambiciosa siempre lo hizo así, siempre le ha funcionado; y otro que además de no conocer la cultura empresarial local se lleva su paquete que tampoco ha funcionado aquí y pretende aplicarlo allí.

Es cierto que Angola es un país de oportunidades y es un país que todo se puede hacer, pero hay una necesidad urgente de cambiar todos los agentes relacionados con estas oportunidades y reeducar para la actitud creativa e innovadora. A mi me parece inusual puede jugar un papel determinante en este proceso.